ESTOY DE REGRESO

Hola a todos.

Hace más de un año que no escribo en mi blog (uff, cómo vuela el tiempo!). Poco después de mi última entrada renuncié a mi trabajo porque consideraba que el horario era muy pesado (60 horas a la semana). A los pocos días de renunciar comencé en un nuevo trabajo que parecía muy relajado pero pronto se convirtió en una pesadilla. Ya no tenía tiempo ni para arreglarme las uñas, siempre tenia trabajo acumulado y comencé a llevar trabajo a la casa y quedarme despierta hasta la una de la mañana. Mi hijo empezó a estudiar este año en la mañana por lo que debo levantarme a las 4:30 a.m. para prepararle el desayuno y la lonchera y alistarlo para el colegio. Con todo esto subí diez kilos sin darme cuenta. De un momento a otro me percaté que había colocado en primer lugar mi trabajo, antes que mi familia, mis amigos y mi salud (estaba en un tratamiento médico y no volví más). Hasta que un sábado tuve que trabajar hasta las 10 de la noche, en la calle más peligrosa de mi ciudad y ni siquiera la empresa me dio el dinero para el taxi. Entonces dije "¡no más!". Sé que la situación está difícil pero mi familia no muere de hambre. Mi esposo publicó este mensaje en su muro del facebook y yo lo presenté como carta de despedida en mi trabajo:

En estos momentos no estoy trabajando. Le dedico tiempo a mi hijo, salgo a realizar mis vueltas personales que tenía pendientes de hace un año, hago esta pequeña entrada a mi blog, me alimento sanamente y hago ejercicio para bajar esos kilos de más ya que pronto tengo la boda de mi cuñado y quiero lucir mi vestido nuevo (o al menos entrar en él). Ya he logrado bajar 6 kilos y estoy muy contenta. Espero encontrar un empleo de medio tiempo que no interfiera en mi vida personal.

Espero que les haya gustado este pequeño mensaje que compartí con ustedes y en estos días continuaré con el tutorial del traje de maid que quedó abandonado hace mucho (y seguiré haciendo ejercicio para volver a entrar en el mío).

Bye.